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Trump y María Elvira Salazar ya están trabajando en una reforma migratoria.

 

Trump y María Elvira Salazar ya están trabajando en una reforma migratoria.

La información que les traigo hoy es de gran relevancia, ya que tiene el poder de transformar la vida de millones de personas. Pero no solo me tomen la palabra, véanlo con sus propios ojos. Así que sin más preámbulos, comencemos. Familia, bienvenidos a todos. Les saluda Shoeba Español TV, esperando que estén disfrutando de un excelente día en este miércoles 20 de noviembre de 2024. En este video, quiero compartir con ustedes unas declaraciones de María Elvira Salazar, una representante y líder de un comité en la Cámara de Representantes. Esta mujer, de ascendencia cubana, lucha incansablemente por el bienestar de la comunidad hispana en este país. Ha logrado muchas cosas, aunque algunas veces no se reconozcan, pero siempre está ahí, defendiendo sus derechos, a diferencia de otros que buscan solo destruir y no informan la verdad. Ella, por el contrario, siempre da la cara. En este video, voy a compartir sus declaraciones, ya que fue invitada a un programa en inglés para hablar sobre la reforma migratoria. Desglosaré ese programa para que puedan entenderlo completamente.

 ¿Quiénes serían los beneficiados? ¿Acaso abrirá un camino hacia la ciudadanía? Todo esto y más lo descubrirán. 


Las declaraciones de María Elvira Salazar en tan solo 59 segundos son sumamente valiosas. En ese breve tiempo, dijo mucho más que lo que muchos medios de comunicación demócratas han soltado en horas de comentarios absurdos. Lo que dijo, palabra por palabra, lo vamos a analizar detenidamente. En una entrevista con Fox News, Salazar habló sobre su proyecto de ley "Dignidad", una propuesta de reforma migratoria. Ella dejó claro que "dignidad" no significa ciudadanía, ya que no todos los inmigrantes que llevan más de 20 años en Estados Unidos, tienen hijos estadounidenses y nunca se han metido en problemas, están buscando un camino hacia la ciudadanía. Muchos de ellos simplemente desean vivir de manera digna en este país por un tiempo determinado, para luego regresar a sus países de origen, construir una vida allí y enviar remesas a sus familias. Su objetivo no es quedarse en Estados Unidos para siempre. Por ello, Salazar destacó que su propuesta no es sobre ciudadanía, sino sobre garantizar una vida digna en lo que ella llama la "tierra prometida".


Sin embargo, advirtió que antes de avanzar con cualquier reforma, se debe asegurar la frontera. Esto es esencial para saber quién entra al país. A su vez, subrayó que muchas personas que llevan 15 o 20 años aquí, como sus propios padres, quienes llegaron legalmente desde Cuba, están contribuyendo enormemente a la economía. Aunque no han recibido los mismos beneficios que otros grupos, como los cubanos, están realizando trabajos esenciales, como los de Nueva York.


Salazar también mencionó que los republicanos tienen la oportunidad de liderar este tema, aunque reconoció que el Congreso es un lugar difícil y tóxico donde muchos no quieren hablar sobre este asunto. Sin embargo, se mostró confiada en que Donald Trump es la persona indicada para arreglarlo, y afirmó estar segura de que él podrá liderar esta causa. La congresista también reveló que ya se reunió con Trump y otros congresistas, y que él está comprometido a trabajar en su proyecto, aunque aún se deben definir ciertos detalles y posibles cambios.


Además, criticó la actitud de los demócratas, quienes en campañas y durante elecciones siempre han hablado de la reforma migratoria, pero cuando no hay elecciones, nadie se interesa por realmente resolver el problema. Salazar afirmó que ha estado trabajando en su paquete de reforma durante mucho tiempo, pero que nunca hubo interés real por parte de los demócratas para someterlo a votación. Sin embargo, espera que Trump pueda cambiar eso y hacer que la gente se dé cuenta de cuál es el partido que verdaderamente se preocupa por la comunidad hispana. Ella confía en que en los próximos cuatro años, Trump hará algo significativo por nuestra comunidad. Si bien no espera que se legalice a los 11, 12 o 13 millones de inmigrantes indocumentados que llevan años trabajando y pagando impuestos, como bien lo menciona María Elvira, espera que aquellos que llevan mucho tiempo aquí, sin problemas legales y con hijos estadounidenses, tengan la oportunidad de regularizar su situación. Ella está convencida de que esto sucederá.


Les compartiré algunos aspectos clave de este proyecto de la ley "Dignidad". Esta propuesta busca incorporar a más contribuyentes a través del programa "Dignidad", lo que permitiría que millones de inmigrantes indocumentados regularicen su situación y comiencen a pagar impuestos, fortaleciendo la base financiera de programas esenciales. En segundo lugar, se podría aumentar la fuerza laboral en sectores críticos, ayudando a resolver la escasez de trabajadores en áreas como la atención domiciliaria, la enfermería y los cuidados personales, lo cual garantizaría una cobertura adecuada para la población envejecida. Es importante destacar que aquellos interesados en áreas como la enfermería y la medicina podrían encontrar muchas oportunidades si logran formarse en estos campos.


En tercer lugar, la ley "Dignidad" contribuiría al crecimiento económico. Se estima que este proyecto podría incrementar el producto interno bruto en 4 billones de dólares en la próxima década, lo que representaría un aumento del 14% en el PIB del país. Por último, pero no menos importante, la ley "Dignidad" garantizaría que programas vitales como Medicare y el Seguro Social continúen beneficiando a nuestros mayores, a la vez que fortalecería nuestra economía y aseguraría que el sueño americano siga vivo para las futuras generaciones. Con los recursos generados por los impuestos de los inmigrantes regularizados, estos programas sociales podrían seguir financiándose sin inconvenientes.

Esto es realmente interesante, y les explicaré por qué. Actualmente, este proyecto cuenta con el apoyo de más de 37 legisladores. "Dignidad" representa una oportunidad histórica para abordar problemas que afectan a todos los estadounidenses. No se trata solo de una ley de inmigración, sino de una ley de seguridad nacional y una ley económica que asegura un futuro próspero para nuestra nación. Además, busca mejorar la confianza pública en el sistema migratorio y en los programas sociales, asegurándose de que sean sostenibles y equitativos.


Por último, uno de los aspectos más importantes de este proyecto de ley es que busca proteger a los "dreamers", otorgándoles un estatus legal y permitiéndoles contribuir plenamente al desarrollo del país. También tiene como objetivo reducir los retrasos en las visas, facilitando la entrada de trabajadores esenciales en sectores clave como la agricultura, la tecnología y la construcción, áreas que enfrentan una grave escasez de mano de obra. Y, finalmente, busca fortalecer la seguridad fronteriza, implementando tecnologías avanzadas y reforzando los controles para garantizar que la inmigración sea ordenada y segura.

Así que ahí lo tienen, este es el proyecto de ley “Dignidad”, un proyecto trabajado y liderado por María Elvira Salazar, una de las hispanas más influyentes en el Congreso.

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