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IMSS e ISSSTE: Así será el pago de pensión de noviembre 2024

IMSS e ISSSTE: Así será el pago de pensión en noviembre de 2024


El próximo pago de pensión para los jubilados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) llegará con una importante diferencia: incluirá un aumento. Ambos sistemas representan pilares fundamentales en la seguridad social de México, abarcando a trabajadores de distintos sectores, y sus pensiones son de gran relevancia para millones de personas.

IMSS e ISSSTE: Así será el pago de pensión de noviembre 2024

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El concepto de "pensión" se refiere al ingreso periódico que una persona recibe, usualmente de manera mensual, tras haber trabajado durante un cierto tiempo y haber alcanzado la jubilación. Sin embargo, no todas las pensiones están ligadas únicamente a la jubilación. En algunos casos, los beneficiarios pueden recibir pensiones debido a una incapacidad física que les impide seguir trabajando o a causa de viudez o lazos de ascendencia. 


Además de las pensiones tradicionales, el gobierno mexicano ofrece otros apoyos económicos a sectores vulnerables con ingresos bajos. Entre ellos, se destacan la Pensión del Bienestar, destinada a los adultos mayores; la tarjeta del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (INAPAM), que ofrece diversos descuentos; y programas de becas dirigidos a estudiantes que, sin este apoyo, podrían verse forzados a abandonar sus estudios por falta de recursos económicos.


Para acceder a estos beneficios gubernamentales, es necesario cumplir ciertos requisitos. Por ejemplo, los adultos mayores que deseen recibir la Pensión del Bienestar deben tener al menos 65 años de edad. En el caso de la tarjeta INAPAM, se exige que los solicitantes hayan cumplido 60 años. Estas ayudas están diseñadas para mejorar la calidad de vida de las personas mayores, ofreciéndoles un alivio financiero. La Pensión del Bienestar, por ejemplo, otorga 6,000 pesos bimestrales, mientras que la tarjeta INAPAM ofrece descuentos en una variedad de servicios y productos esenciales.


En resumen, los sistemas de pensión del IMSS y el ISSSTE, junto con los programas sociales adicionales como la Pensión del Bienestar y la tarjeta INAPAM, juegan un papel crucial en la vida de millones de mexicanos. Las actualizaciones en los montos de las pensiones para noviembre de 2024, que vendrán con aumentos, representan una buena noticia para aquellos que dependen de estos ingresos para su subsistencia.

¿Y qué pasa con las pensiones del IMSS y del ISSSTE?


En el contexto de las pensiones en México, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) representan los dos sistemas más importantes de seguridad social. Estos dos organismos son responsables de proporcionar cobertura de pensiones a millones de trabajadores en diferentes sectores laborales, cada uno con características y normativas específicas que los distinguen. A continuación, desglosamos sus principales diferencias y características:


Pensiones del IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social)  

El IMSS es el principal sistema de seguridad social para los trabajadores del sector privado en México. Está diseñado para proporcionar prestaciones de salud, así como pensiones por jubilación, invalidez y fallecimiento a los empleados de empresas privadas. Además, los trabajadores independientes que decidan afiliarse voluntariamente al IMSS también pueden acceder a las prestaciones, incluyendo la pensión. El sistema de pensiones del IMSS está regulado bajo dos esquemas: la Ley de 1973 y la Ley de 1997, dependiendo del momento en que el trabajador comenzó a cotizar. Quienes cotizaron antes de 1997 pueden optar por una pensión vitalicia calculada en función de las semanas cotizadas y el salario promedio. En cambio, los afiliados después de esa fecha acumulan recursos en una cuenta individual administrada por una AFORE (Administradora de Fondos para el Retiro), lo que hace que su pensión dependa de los ahorros acumulados.


Pensiones del ISSSTE (Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado)  

Por otro lado, el ISSSTE brinda cobertura a los empleados del gobierno y otros trabajadores del sector público. Este sistema, similar al del IMSS, incluye prestaciones por jubilación, incapacidad y fallecimiento, aunque está dirigido exclusivamente a quienes laboran en el ámbito gubernamental. El ISSSTE también maneja dos esquemas de pensiones: el de décimo transitorio, que sigue reglas similares a las de la Ley del IMSS de 1973, y el de cuentas individuales, introducido en 2007. Los empleados del sector público que cotizaron antes de esta reforma pueden optar por una pensión definida basada en su salario promedio y tiempo de servicio. Aquellos que comenzaron a cotizar después de 2007 tienen una cuenta individual administrada por una AFORE, donde los fondos acumulados determinarán el monto de su pensión.

Cuando un trabajador, ya sea del sector privado (IMSS) o del sector público (ISSSTE), está listo para retirarse, debe iniciar el proceso de solicitud de su pensión. Este proceso incluye la verificación de requisitos fundamentales, como la edad mínima de retiro y el número de semanas cotizadas. Para aquellos afiliados al IMSS bajo la Ley de 1973, se requiere haber cotizado al menos 500 semanas para tener derecho a una pensión. En el caso de los afiliados al ISSSTE o al IMSS bajo la Ley de 1997, las semanas mínimas pueden variar, pero la edad mínima suele ser de 60 a 65 años, dependiendo del esquema elegido.


En este punto, el solicitante puede recibir una de dos respuestas:  

1. Resolución favorable: El trabajador es aprobado para recibir una pensión vitalicia. Esto significa que, siempre que siga cumpliendo con los requisitos, recibirá un pago mensual por el resto de su vida. Este ingreso será clave para asegurar su estabilidad económica en la etapa de retiro.

2. Negativa de pensión: En algunos casos, los trabajadores pueden recibir una negativa de pensión. Esto ocurre cuando no cumplen con los requisitos mínimos establecidos por las leyes del IMSS o del ISSSTE, como el número de semanas cotizadas o la edad mínima para el retiro. Si esto sucede, el trabajador tiene la opción de seguir cotizando hasta cumplir los requisitos o recibir un pago único correspondiente a los fondos acumulados en su cuenta de AFORE.

Una vez que un trabajador ha recibido una resolución favorable y ha sido aceptado para recibir una pensión, puede estar tranquilo sabiendo que, a partir de ese momento, recibirá su pago de manera mensual. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los días de pago pueden variar dependiendo de la institución que administra su pensión. Por ejemplo, los pensionados del IMSS suelen recibir sus pagos a principios de mes, mientras que los del ISSSTE suelen recibirlos en fechas específicas preestablecidas.


Este detalle puede ser importante para la planificación financiera de los pensionados, ya que saber cuándo recibirán su dinero les permite organizar mejor sus gastos mensuales. Además, ambos sistemas ajustan las pensiones anualmente en función de la inflación, lo que garantiza que el poder adquisitivo de los pensionados se mantenga, aunque los montos varían dependiendo del índice inflacionario y las políticas gubernamentales.

En los últimos años, tanto el IMSS como el ISSSTE han experimentado reformas importantes que buscan mejorar la sostenibilidad financiera de los sistemas y asegurar que más personas puedan acceder a pensiones dignas. Por ejemplo, las reformas a la Ley del IMSS en 2020 redujeron el número de semanas mínimas requeridas para pensionarse en el esquema de cuentas individuales y aumentaron las aportaciones patronales. Estas reformas tienen el objetivo de incrementar el monto de las pensiones y beneficiar a los trabajadores con menores ingresos.


Por otro lado, el ISSSTE también ha implementado cambios para mejorar la atención a sus afiliados, incluyendo la digitalización de trámites y la posibilidad de realizar solicitudes de pensión en línea. Estos avances han hecho que el proceso de jubilación sea más ágil y accesible, sobre todo para aquellos que viven en zonas alejadas o tienen dificultades para acudir a las oficinas físicas.


En resumen, las pensiones del IMSS y del ISSSTE son fundamentales para garantizar el bienestar de los trabajadores mexicanos en su retiro. Aunque ambos sistemas tienen sus diferencias, comparten el objetivo de proporcionar seguridad económica a millones de personas en el país. Las actualizaciones en los montos de las pensiones y los días de pago reflejan el compromiso de ambos organismos para adaptarse a las necesidades de los pensionados, y las reformas recientes indican que el sistema sigue evolucionando para enfrentar los retos futuros.

De acuerdo con el calendario oficial de pagos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), los pensionados de esta institución recibirán su próximo pago el 1 de noviembre de 2024. En México, los pensionados del IMSS tienen la garantía de recibir sus pagos el primer día de cada mes, siempre que no coincida con un día festivo o un fin de semana. Si esto ocurre, el depósito se retrasará hasta el siguiente día hábil. Es importante que los beneficiarios estén atentos a estos detalles para planificar sus finanzas personales y evitar preocupaciones innecesarias.


Sin embargo, el pago de noviembre de este año será diferente y especial. Además de la mensualidad habitual que corresponde a este mes, los pensionados recibirán un segundo depósito, correspondiente al aguinaldo. El IMSS estipula que los jubilados tienen derecho a recibir un aguinaldo anual que equivale a una mensualidad de su pensión. Este monto adicional es un derecho adquirido por los pensionados y les proporciona un apoyo extra en la temporada de fin de año, cuando los gastos suelen incrementarse debido a las celebraciones navideñas, compras de regalos y otros compromisos económicos.

El aguinaldo es un pago adicional que reciben los pensionados cada año en el mes de noviembre. Este pago tiene un valor equivalente a una mensualidad de la pensión ordinaria que percibe el jubilado, aunque es importante señalar que existen algunas exclusiones que los beneficiarios deben tener en cuenta. El monto del aguinaldo no incluye el importe por asignaciones familiares ni ayudas asistenciales que algunos pensionados reciben en su pensión mensual. Esto significa que solo se toma en cuenta la cuantía base de la pensión, sin los montos adicionales que puedan corresponder por tener dependientes o recibir algún tipo de asistencia complementaria.


El aguinaldo es una prestación establecida en la Ley del Seguro Social y tiene como objetivo brindar un respaldo financiero extra a los pensionados en un periodo del año en el que tradicionalmente aumentan los gastos. Este ingreso adicional se deposita de forma automática junto con la pensión mensual, por lo que no es necesario realizar ningún trámite adicional para recibirlo. Los pensionados pueden disponer de este dinero a través de su cuenta bancaria habitual o en los medios que utilicen para retirar su pensión cada mes.

Como mencionamos anteriormente, los pagos de pensión del IMSS se realizan el primer día de cada mes, pero existen excepciones en casos donde ese día coincide con un fin de semana o un día de descanso obligatorio. En esas situaciones, el IMSS pospone el depósito hasta el siguiente día hábil. Esto puede generar cierta incertidumbre entre los pensionados, por lo que es recomendable estar atentos a los días no laborables y planificar en función de ellos.


En el caso específico de noviembre de 2024, el 1 de noviembre será un viernes, por lo que los pensionados podrán recibir su pago sin ningún tipo de retraso. Sin embargo, aquellos que suelen retirar su pensión en ventanilla deben tener en cuenta que si por alguna razón no pueden hacerlo el mismo día, podrán realizarlo en los días siguientes, siempre que la institución bancaria correspondiente esté operando con normalidad.

Dado que noviembre incluye este pago adicional, es recomendable que los pensionados hagan una planificación cuidadosa de sus finanzas personales. Aunque recibir el aguinaldo representa un alivio económico importante, también es un momento clave para gestionar con prudencia los gastos que se realizan. Muchas personas aprovechan este ingreso extra para realizar compras relacionadas con las festividades navideñas o para cubrir deudas y compromisos adquiridos a lo largo del año.


Una buena estrategia es destinar una parte del aguinaldo al ahorro, especialmente si se cuenta con recursos adicionales como las asignaciones familiares o ayudas asistenciales. Tener un colchón financiero puede ser muy útil para enfrentar gastos imprevistos o emergencias médicas que, en ocasiones, pueden surgir en los últimos meses del año. También es importante recordar que en enero, mes posterior a las festividades, los gastos suelen ser elevados, por lo que mantener cierta prudencia con el uso del aguinaldo puede ayudar a iniciar el año con mayor estabilidad financiera.


El cálculo del aguinaldo para los pensionados del IMSS es relativamente sencillo. Según lo establecido por el IMSS, el monto de este pago extraordinario corresponde al valor de una mensualidad de la pensión base, sin incluir las asignaciones familiares ni las ayudas asistenciales. Por lo tanto, si un pensionado recibe una pensión mensual de 10,000 pesos, el aguinaldo será también de 10,000 pesos. En caso de que el pensionado reciba algún tipo de ayuda por tener dependientes o asignaciones adicionales, estas no se contabilizan para el cálculo del aguinaldo, por lo que el monto del pago adicional será menor al total que reciben mensualmente.


Es importante recordar que el aguinaldo se deposita automáticamente en la misma cuenta bancaria donde el pensionado recibe su pensión mensual. No es necesario realizar ninguna solicitud ni presentar documentos adicionales para obtener este beneficio.


El pago de la pensión en noviembre de 2024 será diferente para los jubilados del IMSS, ya que además de la pensión regular, recibirán su aguinaldo, un pago equivalente a una mensualidad más. Este derecho es parte de las prestaciones establecidas por ley y representa una ayuda financiera importante para los pensionados en una época del año donde los gastos suelen aumentar.


Es esencial que los pensionados estén al tanto de las fechas de pago y planifiquen bien el uso de estos ingresos adicionales. Recibir el aguinaldo brinda una oportunidad para cubrir gastos extra y, al mismo tiempo, destinar parte de este dinero a ahorros o inversiones que permitan tener mayor estabilidad económica a largo plazo.

En el caso de las pensiones de Cesantía en Edad Avanzada o Vejez, que se encuentran bajo el amparo de la Ley del Seguro Social vigente, los pensionados no tienen derecho a recibir el pago del aguinaldo. A diferencia de otros esquemas de pensión dentro del IMSS, estas modalidades de pensión no contemplan la entrega de este beneficio adicional a fin de año. El concepto de aguinaldo, que usualmente representa un pago equivalente a una mensualidad adicional, no aplica en estos casos, lo que significa que los pensionados de Cesantía en Edad Avanzada o Vejez solo recibirán su pensión mensual regular en noviembre, sin el incremento que otros jubilados del IMSS sí perciben por el concepto de aguinaldo.


Este aspecto es importante de considerar para quienes se encuentran pensionados bajo estas modalidades, ya que deben ajustar sus finanzas de acuerdo a este ingreso regular sin la expectativa de un pago adicional. Aunque no reciben el aguinaldo, los pensionados bajo la Ley del Seguro Social vigente siguen disfrutando de los otros beneficios que el sistema les otorga, como el acceso a los servicios de salud, prestaciones sociales y los derechos adquiridos en cuanto a su pensión mensual. Sin embargo, el aguinaldo sigue siendo una prestación exclusiva para ciertos tipos de pensiones del IMSS.


Por otro lado, los pensionados del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), que agrupa a los trabajadores del sector público, sí recibirán su aguinaldo, aunque bajo un esquema ligeramente diferente al del IMSS. En el caso de las pensiones del ISSSTE, el pago se realiza mensualmente al final de cada mes. Esto significa que el depósito correspondiente al mes de noviembre de 2024 se efectuará el 31 de octubre, un día antes de que inicie oficialmente el mes de noviembre. Esto es debido a que el ISSSTE sigue un calendario de pagos en el cual los pensionados siempre reciben su pensión correspondiente antes de que comience el mes siguiente.


En lo que respecta al aguinaldo de los pensionados del ISSSTE, este se distribuye en dos partes. A diferencia del IMSS, donde el aguinaldo se entrega de manera completa en noviembre, el ISSSTE opta por dividir el pago del aguinaldo en dos mitades. La primera parte del aguinaldo se entregará durante la primera quincena de noviembre de 2024, proporcionando a los pensionados un alivio financiero adicional en esta temporada del año. Este pago parcial del aguinaldo puede ser utilizado por los jubilados para hacer frente a los gastos que se presentan hacia el cierre del año, como compras relacionadas con las festividades o la preparación para la Navidad.


La segunda parte del aguinaldo, en cambio, no llegará sino hasta enero de 2025. Esta estrategia de dividir el aguinaldo en dos pagos tiene la intención de proporcionar un ingreso adicional a los pensionados tanto en el último trimestre del año como al inicio del siguiente, ayudando así a suavizar los gastos que suelen presentarse durante las celebraciones de fin de año y el comienzo del nuevo año. Enero es conocido por ser un mes de mayores dificultades económicas, dado que muchas personas enfrentan los costos acumulados de diciembre, por lo que este pago adicional en enero puede ser de gran ayuda para los pensionados del ISSSTE.


Es importante mencionar que, para quienes están pensionados bajo el sistema del ISSSTE, el aguinaldo que se entrega sigue los lineamientos establecidos en las leyes y regulaciones que rigen este sistema de pensiones. Al igual que ocurre con el IMSS, el aguinaldo del ISSSTE corresponde a un monto equivalente a una mensualidad de la pensión base del jubilado, sin considerar posibles asignaciones familiares o ayudas asistenciales. Esto significa que el valor del aguinaldo es equivalente a lo que el pensionado recibe cada mes por concepto de su pensión regular, con la salvedad de que no incluye montos adicionales que puedan provenir de otros conceptos.


Para los pensionados del ISSSTE, recibir el aguinaldo en dos partes tiene sus ventajas y desventajas. Por un lado, el hecho de recibir una parte del aguinaldo en noviembre permite que los jubilados dispongan de recursos adicionales antes de las festividades, lo que les ayuda a cubrir los gastos propios de la temporada. Sin embargo, al no recibir el aguinaldo completo en noviembre, algunos pensionados podrían sentir que tienen menos capacidad financiera en ese momento, ya que deben esperar hasta enero para recibir el resto de su aguinaldo. Aun así, este esquema de pagos busca equilibrar el flujo de dinero para que los pensionados no enfrenten dificultades financieras al inicio del año.


Al igual que ocurre con los pensionados del IMSS, es fundamental que los jubilados del ISSSTE planifiquen cuidadosamente el uso de su pensión y del aguinaldo. La primera parte del aguinaldo, que se entregará en noviembre, puede ser destinada a cubrir gastos extraordinarios relacionados con las festividades de fin de año, mientras que la segunda parte, que se entregará en enero, puede ser utilizada para hacer frente a los compromisos económicos que surgen en ese mes.


Además, es recomendable que los pensionados del ISSSTE mantengan una vigilancia constante sobre las fechas de pago y se aseguren de estar al tanto de cualquier posible cambio en el calendario de depósitos. El hecho de que el ISSSTE realice el pago de la pensión de noviembre un día antes, el 31 de octubre, es una medida que puede sorprender a algunos beneficiarios si no están atentos a estas modificaciones en el calendario. Planificar con antelación y hacer un uso prudente de estos ingresos adicionales es clave para asegurar una estabilidad financiera durante los últimos meses del año y a inicios del siguiente.

En resumen, mientras que los pensionados del IMSS recibirán su aguinaldo completo en noviembre de 2024, aquellos que se encuentran bajo el sistema de pensiones del ISSSTE recibirán su aguinaldo en dos partes: la primera en la primera quincena de noviembre y la segunda en enero de 2025. Este esquema permite a los pensionados del ISSSTE contar con ingresos adicionales tanto en la temporada navideña como en el comienzo del nuevo año. Para los pensionados de Cesantía en Edad Avanzada o Vejez bajo el amparo de la Ley del Seguro Social vigente, es importante recordar que no son elegibles para recibir el aguinaldo, por lo que su ingreso en noviembre será únicamente el correspondiente a la pensión mensual.

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