En las últimas predicciones electorales de 2024, Donald Trump está emergiendo como el claro favorito contra Kamala Harris. A solo 26 días de las elecciones, Trump tiene un 55,4% de probabilidad de victoria. En los últimos dos días, varios estados clave han cambiado a su favor, alterando significativamente el mapa electoral. En este video, examinaremos de cerca el mapa electoral revisado de 2024 basado en las estimaciones más recientes de PolyMarket, comenzando con la costa oeste y progresando a través de cada estado para proporcionar un análisis exhaustivo de lo que estas proyecciones indican para las próximas elecciones.
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Comenzando en la costa oeste, se espera que Kamala Harris gane los bastiones demócratas tradicionales de Washington, Oregon y California sin mucha dificultad. Estos tres estados se consideran seguros para el Partido Demócrata, con Harris con al menos un 95% de probabilidad de ganar en cada uno de ellos. Encima California, con sus 54 votos electorales, sigue siendo el premio más grande de la costa oeste, y ha sido un bastión demócrata durante décadas. Oregon y Washington, del mismo modo, han apoyado sistemáticamente a los candidatos demócratas en las recientes elecciones presidenciales. Con estos estados firmemente en la columna de Harris, asegura una base sólida de votos electorales sobre los que construir.
Sin embargo, las elecciones serán mucho más competitivas en Nevada. En 2020, Joe Biden llevó al estado por poco más de dos puntos porcentuales, pero la dinámica ha cambiado significativamente en 2024. Según las estimaciones de PolyMarket, Nevada es ahora esencialmente un golpe, con Harris con un estrecho 52% de probabilidad de victoria en comparación con el 49% de Trump. Este margen delgado de afeitar hace de Nevada uno de los estados más disputados del país. Si bien Harris actualmente tiene una ligera ventaja, la carrera podría fácilmente ir en cualquier dirección, lo que convierte a Nevada en un campo de batalla crítico en las últimas semanas de la campaña.
A continuación, nos dirigimos a Arizona, donde Trump ha mejorado significativamente su posición en comparación con 2020. A pesar de perder el estado ante Joe Biden en las últimas elecciones, Trump ahora tiene una ventaja dominante, con un 66% de probabilidad de victoria según PolyMarket. Esto marca un cambio dramático desde antes de la campaña, cuando Harris había esperado construir sobre el éxito de Biden en el estado. Sin embargo, su campaña ha luchado en Arizona, y el sólido desempeño de Trump en las encuestas recientes ha consolidado su posición como la favorita.
La erosión del apoyo demócrata en Arizona se ha atribuido a varios factores. El desempeño de Harris durante la Convención Nacional Demócrata fue decepcionante, y su campaña no ha logrado energizar a los grupos de votantes clave en el estado. Además, la decisión de los líderes del Partido Demócrata de reemplazar a Joe Biden como candidato ha fracasado en muchos estados indecisos, incluido Arizona. La base demócrata parece fracturada, y Harris no ha sido capaz de replicar el éxito de Biden en la construcción de una amplia coalición de apoyo. Como resultado, Arizona, que una vez fue vista como una posible selección para los demócratas, ahora parece firmemente en la columna de Trump. El estado probablemente estará marcado como "rojo de inclinación" en la mayoría de los mapas electorales, lo que refleja la creciente ventaja de Trump.
Tras mudarse a Colorado y Nuevo México, se espera que Kamala Harris gane ambos estados cómodamente. En Colorado, Harris tiene un 97% de posibilidades de victoria, mientras que en Nuevo México, sus posibilidades están marcadas en el 91%. Aunque antes había preocupaciones en la campaña de que Nuevo México podría ser más competitivo, el estado se ha mantenido relativamente estable a favor de los demócratas. En Nuevo México se consideró brevemente un campo de batalla potencial después de la retirada de Joe Biden de la carrera, pero Harris ha logrado consolidar el apoyo entre los votantes demócratas, asegurando que el estado permanezca en la columna azul.
Colorado, con su creciente población urbana y sus inclinaciones progresistas, se ha vuelto cada vez más demócrata en los últimos años. La fuerte posición de Harris en el estado refleja esta tendencia, y es poco probable que Trump sea capaz de hacer incursiones significativas allí. Como resultado, Colorado y Nuevo México estarán marcados como "azul seguro" en nuestro mapa electoral.
Texas, el segundo estado más grande en términos de votos electorales, sigue siendo un bastión republicano. Según PolyMarket, Trump ha mantenido una ventaja consistente durante todo el ciclo electoral, y se espera que gane el estado por tercera vez consecutiva. Con un 90% de probabilidad de victoria, el dominio de Trump en Texas es incuestionable. El estado ha sido una piedra angular de las victorias presidenciales republicanas durante décadas, y a pesar de los cambios demográficos que lo han hecho algo más competitivo en los últimos años, permanece firmemente en las garras del Partido Republicano.
Texas es un estado crucial para cualquier candidato republicano, y sus 40 votos electorales son esenciales para el camino de Trump hacia la victoria. Aunque los demócratas han logrado avances en los centros urbanos del estado, las áreas rurales y suburbanas continúan proporcionando una sólida base de apoyo a Trump. Como resultado, Texas se marcará como "rojo seguro" en el mapa electoral, lo que refleja las sólidas inclinaciones republicanas del estado.
En las Grandes Llanuras y la Montaña Oeste, se espera que Trump domine. Estados como Utah, Wyoming, Idaho, Montana, Dakota del Norte y Dakota del Sur están sólidamente en la columna republicana, con Trump con más del 90% de probabilidad de ganar en cada uno de ellos. Del mismo modo, se prevé que Trump gane Nebraska, Kansas y Oklahoma por amplios márgenes. La única área de Nebraska que es competitiva es el segundo distrito del Congreso del estado, que asigna un voto electoral por separado del resto del estado. En ese distrito, Harris tiene un 89% de probabilidades de ganar, por lo que es un raro punto azul en una región roja.
También se espera que el variopinto de Alaska, tradicionalmente un estado republicano, vaya por Trump, con un 92% de probabilidad de victoria. En el extremo opuesto del mapa, Hawái se considera un estado demócrata seguro, con Harris con un 95% de probabilidad de ganar. Es poco probable que estos estados cambien la dinámica general de la carrera, ya que están firmemente en los campos de sus respectivos partidos.
Para que Kamala Harris tenga alguna posibilidad realista de ganar la presidencia, debe ganar la mayoría de los estados clave del medio oeste. Esto incluye Minnesota, Wisconsin, Michigan y Pensilvania, estados que formaron el "muro azul" en el que los demócratas confiaron durante décadas antes de la sorpresiva victoria de Trump en 2016. En 2020, Joe Biden logró reconstruir el muro azul, pero la carrera de 2024 está demostrando ser mucho más difícil para Harris.
Minnesota, tradicionalmente un bastión demócrata, no ha votado por un candidato presidencial republicano desde 1972. A pesar de esto, la posición de Harris en el estado es sorprendentemente débil. Según PolyMarket, tiene un 91% de probabilidades de ganar Minnesota, que, aunque sigue siendo alto, es menor de lo esperado para un estado con una larga historia de apoyo a los candidatos demócratas. En 2020, Biden ganó Minnesota por un margen significativo, pero el liderazgo de Harris en las encuestas se ha reducido a solo el 4%. Aunque es probable que Minnesota siga en la columna demócrata, la carrera más cercana de lo esperado sugiere que la campaña de Harris está luchando incluso en estados tradicionalmente seguros.
Wisconsin, por otro lado, se ha convertido en un importante campo de batalla. Las estimaciones de PolyMarket muestran a Trump con una ligera ventaja en el estado, con una probabilidad de victoria del 50.5% en comparación con el 49.5% de Harris. Esta es la primera vez desde principios de agosto que Trump ha sido favorecido en Wisconsin, y los promedios de las encuestas reflejan una carrera igualmente apretada. Si bien Harris todavía lidera en algunas encuestas, la tendencia general ha cambiado a favor de Trump, con varias encuestas recientes que muestran un empate. Dada la importancia del estado en el mapa electoral general, Wisconsin se marcará como "rojo inmovilizado" por ahora, pero la carrera sigue siendo muy fluida.
Michigan, otro campo de batalla clave, también está en tendencia en la dirección de Trump. En 2020, Biden ganó Michigan por 2.8%, convirtiéndolo en uno de los estados de swing más liberales. Sin embargo, Trump ahora lidera los promedios de las encuestas en casi un 1%, y PolyMarket le da un 52% de posibilidades de ganar el estado. Este es un cambio significativo con respecto a hace apenas unas semanas, cuando Harris tenía un 68% de probabilidad de victoria. Los 15 votos electorales de Michigan son cruciales para ambos candidatos, y el estado probablemente será un punto focal en los últimos días de la campaña. Por ahora, Michigan será marcado como "rojo inmovilizado", reflejando el estrecho liderazgo de Trump.
Pensilvania, la última pieza del muro azul, también se está inclinando hacia Trump. Con un 56% de probabilidad de victoria según PolyMarket, Trump es ahora el favorito en un estado que Biden llevó en 2020. Las encuestas muestran que Trump lidera un 0,3%, y los 19 votos electorales del estado podrían resultar decisivos para determinar el resultado de las elecciones. Pensilvania se marcará como "rojo liso" en nuestro mapa, lo que refleja la creciente ventaja de Trump.
En el sur, Trump continúa dominando en estados como Missouri, Arkansas, Louisiana, Mississippi, Alabama, Tennessee, Kentucky, Virginia Occidental y Carolina del Sur. Estos estados han sido durante mucho tiempo fortalezas republicanas, y se espera que Trump los gane cómodamente.
Los estados más competitivos del sur incluyen Virginia, Carolina del Norte, Georgia y Florida. Se espera que Virginia, aunque algo competitiva al principio de la carrera, vaya a Harris, con un 89% de probabilidad de victoria. A pesar de cierto endurecimiento en las encuestas, Virginia sigue siendo un estado confiablemente azul, y es probable que Harris gane sus 13 votos electorales. El estado se marcará como "probablemente azul" en nuestro mapa.
Encargado Carolina del Norte se está inclinando hacia Trump, con el ex presidente con un 62% de probabilidad de victoria. Trump ganó el estado tanto en 2016 como en 2020, y las últimas encuestas lo muestran con una ventaja consistente. Los 16 votos electorales de Carolina del Norte se marcarán como "rojo inclinado" en el mapa.
Georgia, una vez considerada un campo de batalla, también se está inclinando hacia Trump. Después de la estrecha victoria de Biden en el estado en 2020, se esperaba que Georgia volviera a ser un campo de batalla clave en 2024. Sin embargo, Trump ahora tiene un 61% de probabilidad de ganar el estado, y las encuestas recientes lo muestran liderando un 1,5%. Aunque la carrera sigue cerca, Trump es ahora el favorito en Georgia, y el estado estará marcado como "rojo limpio" en nuestro mapa.
Florida, el estado de swing más grande del sur, ha cambiado decisivamente a favor de Trump. Según PolyMarket, Trump tiene un 71% de probabilidades de ganar Florida, y las encuestas lo muestran liderando un 3-4%. Los 30 votos electorales de Florida son críticos para ambos candidatos, pero el sólido desempeño de Trump en el estado hace que sea poco probable que Harris pueda ganar allí. en Florida se marcará como "probablemente rojo" en el mapa.
En el noreste, se espera que Kamala Harris tenga un buen desempeño. Estados como Nueva York, Nueva Jersey, Massachusetts y Connecticut están sólidamente en la columna demócrata, con Harris con más de un 90% de probabilidad de ganar cada uno de ellos. Vermont y Rhode Island son igualmente seguros para los demócratas.
Sin embargo, Maine y New Hampshire son más competitivos. En Maine, Harris es favorecido para ganar tres de los cuatro votos electorales del estado, con un 95% de probabilidad de victoria en las elecciones estatales y de primer distrito del Congreso. Sin embargo, se espera que Trump gane el segundo distrito del Congreso, que otorga un voto electoral por separado del resto del estado. Trump tiene un 68% de probabilidades de ganar ese distrito, lo que lo convierte en una rara mancha roja en una región azul.
En Nueva Hampshire, una vez un campo de batalla clave, ahora se está inclinando hacia Harris. PolyMarket le da un 69% de posibilidades de ganar el estado, y las encuestas recientes muestran su liderazgo en un 5-6%. Los cuatro votos electorales de New Hampshire se marcarán como "azul de hoja" en nuestro mapa.
Basado en las últimas estimaciones de PolyMarket, Donald Trump es el claro favorito para ganar las elecciones presidenciales de 2024. Actualmente tiene un 55,4% de probabilidad de victoria, en comparación con el 44,6% de Kamala Harris. Varios estados clave han cambiado el favor de Trump en los últimos días, incluyendo Arizona, Wisconsin, Michigan y Pensilvania. Con estos estados inclinándose ahora hacia Trump, el mapa electoral ha cambiado significativamente a su favor.
Harris todavía tiene un camino hacia la victoria, pero requerirá que gane la mayoría de los estados de campo de batalla restantes. Debe aferrarse a Nevada, Minnesota y New Hampshire, mientras voltea al menos dos de los cuatro estados del medio oeste que actualmente se inclinan hacia Trump. Si puede hacer eso, la carrera probablemente se reducirá a unos pocos miles de votos en estados clave.
Por ahora, sin embargo, Trump es el claro favorito, y el impulso está de su lado al entrar en las últimas semanas de la campaña. continuación de nuestra cobertura para las últimas actualizaciones sobre las elecciones de 2024.
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